Después de un intenso verano cuyo interés futbolístico ha estado monopolizado por la caza furtiva del Real Madrid de Florentino Pérez, la Cultural y Deportiva Leonesa se ha presentado en la tarde de ayer a su afición, o lo que queda de ella, en el primer partido oficial de la temporada. Tras la eliminación en el play-off de ascenso, la entidad presidida por Domingo Cueto ha sido un filón informativo durante todo el periodo estival: primero gracias al proceso abierto de ley concursal, luego con la frustrada renovación de Álvaro Cervera y, finalmente, con la radical transformación de la plantilla. Terminados los experimentos de pretemporada y una vez superada la primera ronda de Copa, ¿qué podemos esperar de la Cultural en el recién estrenado curso futbolístico?
Para empezar, el dibujo planteado por Yosu Uribe tiene un carácter más ofensivo: cuatro defensas, cuatro mediocampistas, un mediapunta y un delantero. Frente al Pontevedra, la responsabilidad creativa recayó en la dupla de pelaos: Mato y Pereira. Los dos mediocentros, sin embargo, no estuvieron al nivel exigible, escasos de habilidad a la hora de controlar la pelota y un tanto erráticos en la contención. La Cultural, sin fluidez en su juego, se vio obligada recurrir a un fútbol más directo en el que los hombres de banda, Yahvé y Ferrán, tuvieron pocas oportunidades de lucirse y que monopolizó el esfuerzo ofensivo en la figura de Jito, un ariete que dejó muy buenas sensaciones en la tarde de ayer. A pesar de no controlar el juego, los leoneses crearon oportunidades lo suficientemente claras para haber decantado el partido de su lado, aunque quizás no hubiera sido lo más justo.
De hecho, el Pontevedra, otra plantilla totalmente renovada, dio una fantástica imagen. No sería fácil recordar a un equipo que, en los últimos años, haya movido la pelota con la tranquilidad y la solvencia con que lo hicieron los gallegos. Su facilidad para aproximarse al área rival, eso sí, se vio compensada por una escasa capacidad de desborde y falta de precisión en el último pase. Los locales defendieron su puerta más por esfuerzo que por colocación, pero siguieron concediendo contraataques, inexplicablemente, incluso con el marcador a favor. Un chut de Jito taponado por el portero granate pudo haber certificado la primera victoria culturalista, pero el gol de Nevado, instantes después, hizo justicia en una disputa de virtudes contrapuestas.
Como es lógico a estas alturas, son todavía muchas las lagunas de la cultu, en aspectos técnicos y tácticos, que sólo con el rodaje del equipo se podrán ir corrigiendo. Las próximas citas, frente al Estepona en Copa y al Izarra en Liga, servirán a ese propósito. Es de esperar, también, que los resultados acompañen y la afición lo haga también, porque si este equipo debe caminar solo, será complicado que llegue lejos.
lunes, 31 de agosto de 2009
Se abre el telón
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Sólo una puntualización. No es Antonio, es Domingo Cueto.
Un saludo
Gracias por avisar. Corregido!
Publicar un comentario